Bajo el título de Historias de Nueva York tres directores, Woody Allen, Francis F. Coppola y Martin Scorsese ofrecen tres muy distintas historias de la misma ciudad.
Scorsese muestra el estado final de una relación entre un pintor de fama y la que era su ayudante. En el loft en el que viven hay cuadros de ambos, muy distintos, de gran formato y llenos de energía los de él, más pequeños y delicados los de ella. Los artistas Chuck Connelly y Susan Hambleton son los autores reales de las obras que se muestran en la película.
Qué distintos se ven los cuadros en el caballete en el estudio y en la escena final, en la exposición, colgados de las paredes de color blanco, observados por los elegantes habitantes de La Ciudad...
Me fascinaron.
Me fascinaron.
¡Que diferencia de los cuadros vistos en un estudio, de los que luego se ven en las películas!
ResponderEliminarSaludos
Sí, Jubi,
EliminarParece que nos desconcentra que un cuadro esté apoyado en un caballete rodeado de los utensilios de un pintor y lo valoramos más colgado de una pared blanca. Es un efecto óptico curioso.
Gracias por la visita!