@MagdaRevetllat
Otra gran gala, esta vez en Suecia, con un oscuro escenario salpicado de resplandores y efectos varios. Los presentadores fueron Petra Mede, que alternaba el inglés y el francés además de frases en su propio idioma y el ganador de la anterior competición Mans Zelmerlöw. En algunos momentos aderezaron la noche cantando, como por ejemplo (minuto 2h 35m) en el momento que mostraban el resultado de la invetigación que daba con la fórmula perfecta para ganar el concurso:
Las canciones eran presentadas por videos de pocos segundos que mostraban a cada participante en su propio país. El ritmo alto de cambios se repitió en las votaciones pues 42 países votando lleva su tiempo, y en televisión nadie quiere espectadores o público dormidos.
En mi opinión fueron remarcables las actuaciones de Italia (minuto 37) aunque la joven intérprete perdía el tono en varios momentos de la canción, que mezclaba frases en italiano y en inglés. Frans, el representante de Suecia, hizo buena representación. El atractivo joven en atuendo informal recordaba un poco a su predecesor. Tal vez el país anfitrión prefirió no ganar de nuevo y envió un producto parecido sabiendo que como las modas, Eurovisión no repite favorito de un año a otro. Bulgaria (minuto 44) vistió a su representante con un traje que, al quedar iluminado, parecía un pivote de señalización de la carretera. Alemania (minuto 53) envió a una joven que vestida con indumentaria manga, quedó en última posición a pesar que la canción, en inglés, no estaba nada mal. Uno de mis favoritos Francia, (minuto 57), quedó en buena posición. El video promocional mostraba dos historias de superación personal y la puesta en escena era dinámica pero lejos de esas emotivas escenas. Cuando se cumplía una hora de programa cantó el representante de Polonia, que su posición en las votaciones era baja hasta que las votaciones del público le remontarion de una manera espectacular.
A las 2 horas y dos minutos de programa una simpática colaboración: Ian McKellen y Derek Jacobi interpretan en el sofá de su casa, una apacible noche de festival. McKellen comenta que de joven consideró presentarse al certamen y Jacobi responde: Cuando tú eras joven no existía Eurovisión.
Rusia (1h 27m) hizo una impresionante puesta en escena y a continuación España cantó en inglés bastante aceptable, la canción tenía ritmo, aunque el baile patoso de la cantante lo estropeó un poco. Gran Bretaña (1h 55m) dos jóvenes que interpretaron una muy aceptable romántica melodía.
Y ganó Ucraina con un tema que recordaba las deportaciones ordenadas por Stalin. Tema muy criticado por Rusia que intentó vetarlo acudiendo a la normativa de no aceptar temas políticos. Las normativas son flexibles, como lo sabe el representante de Bielorrusia que no pudo llegar a la final con su puesta en escena, desnudo y con un lobo. Eurovisión no acepta animales en escena pero no tiene una normativa sobre salir desnudo...
Pues un año más.
Otra gran gala, esta vez en Suecia, con un oscuro escenario salpicado de resplandores y efectos varios. Los presentadores fueron Petra Mede, que alternaba el inglés y el francés además de frases en su propio idioma y el ganador de la anterior competición Mans Zelmerlöw. En algunos momentos aderezaron la noche cantando, como por ejemplo (minuto 2h 35m) en el momento que mostraban el resultado de la invetigación que daba con la fórmula perfecta para ganar el concurso:
unos tambores tocados por hombres fuertes... y una abuela
un hombre corriendo en una rueda... como si fuera un hamster
un piano incendiado
un patinador ruso
un violinista
un antiguo instrumento del folclore popular...
Las canciones eran presentadas por videos de pocos segundos que mostraban a cada participante en su propio país. El ritmo alto de cambios se repitió en las votaciones pues 42 países votando lleva su tiempo, y en televisión nadie quiere espectadores o público dormidos.
En mi opinión fueron remarcables las actuaciones de Italia (minuto 37) aunque la joven intérprete perdía el tono en varios momentos de la canción, que mezclaba frases en italiano y en inglés. Frans, el representante de Suecia, hizo buena representación. El atractivo joven en atuendo informal recordaba un poco a su predecesor. Tal vez el país anfitrión prefirió no ganar de nuevo y envió un producto parecido sabiendo que como las modas, Eurovisión no repite favorito de un año a otro. Bulgaria (minuto 44) vistió a su representante con un traje que, al quedar iluminado, parecía un pivote de señalización de la carretera. Alemania (minuto 53) envió a una joven que vestida con indumentaria manga, quedó en última posición a pesar que la canción, en inglés, no estaba nada mal. Uno de mis favoritos Francia, (minuto 57), quedó en buena posición. El video promocional mostraba dos historias de superación personal y la puesta en escena era dinámica pero lejos de esas emotivas escenas. Cuando se cumplía una hora de programa cantó el representante de Polonia, que su posición en las votaciones era baja hasta que las votaciones del público le remontarion de una manera espectacular.
A las 2 horas y dos minutos de programa una simpática colaboración: Ian McKellen y Derek Jacobi interpretan en el sofá de su casa, una apacible noche de festival. McKellen comenta que de joven consideró presentarse al certamen y Jacobi responde: Cuando tú eras joven no existía Eurovisión.
Rusia (1h 27m) hizo una impresionante puesta en escena y a continuación España cantó en inglés bastante aceptable, la canción tenía ritmo, aunque el baile patoso de la cantante lo estropeó un poco. Gran Bretaña (1h 55m) dos jóvenes que interpretaron una muy aceptable romántica melodía.
Y ganó Ucraina con un tema que recordaba las deportaciones ordenadas por Stalin. Tema muy criticado por Rusia que intentó vetarlo acudiendo a la normativa de no aceptar temas políticos. Las normativas son flexibles, como lo sabe el representante de Bielorrusia que no pudo llegar a la final con su puesta en escena, desnudo y con un lobo. Eurovisión no acepta animales en escena pero no tiene una normativa sobre salir desnudo...
Pues un año más.
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